Resumen
Introducción
Se sabe que el entorno metabólico en los tumores isquémicos e hipóxicos contribuye a la progresión del cáncer. Es importante destacar que los cambios metabólicos peculiares que ocurren en las células malignas (el aumento de la glucólisis y el ciclo de Krebs obstaculizado) pueden contribuir a la disminución de la defensa dependiente de antioxidantes en los tumores isquémicos e hipóxicos.
Zonas cubiertas
En la clínica, la saturación de oxígeno de los tumores se suele conseguir mediante la aplicación de ozono hidrosoluble y oxigenoterapia hiperbárica. Se ha demostrado que la oxigenación tumoral inhibe el crecimiento tumoral y potencia los efectos antitumorales de la quimiorradioterapia en experimentos con animales y en entornos clínicos. La oxigenación del tumor podría mejorar los efectos antitumorales logrados por la oclusión de los vasos sanguíneos del tumor o la terapia angioestática.
Opinión experta
Debido a la profunda influencia de las ERO tanto en la inmunidad innata como en la adaptativa, la oxigenoterapia, cuando se combina de forma simultánea o secuencial con intervenciones inmunoterapéuticas (como la inhibición del punto de control inmunitario, la inmunoestimulación inducida por fármacos, la terapia celular adoptiva, la hipertermia, etc.), podría ser considerado como un nuevo enfoque biológico clínico altamente efectivo para el tratamiento del cáncer.
Puntos destacados del artículo
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Las especies reactivas de oxígeno inducidas por el estrés oxidativo pueden dañar preferentemente las células tumorales sin afectar significativamente a las células normales
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La oxigenoterapia puede potenciar los efectos antitumorales de la quimiorradioterapia
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La oxigenoterapia podría combinarse eficazmente con la inmunoterapia para lograr los máximos efectos anticancerígenos con efectos secundarios mínimos
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